fbpx

Síndrome metabólico: ¿por qué se llega a él y cómo evitarlo?

Cada vez es más común escuchar sobre el síndrome metabólico o enterarse de que algún conocido fue diagnosticado con él. Esto es porque el concepto se ha difundido ampliamente en los años recientes, pero también porque los hábitos perjudiciales de nuestra sociedad occidental aumentan el riesgo de tener síndrome metabólico. 

El primer paso para prevenir o tratar una condición es conocerla lo mejor que podamos. Si tu médico te ha diagnosticado síndrome metabólico, es importante que tomes medidas. Por eso, hoy en Eurolife, te contaremos qué es el síndrome metabólico, por qué se llega a él y cómo prevenirlo.

¿Qué es el síndrome metabólico?

El síndrome metabólico no es una enfermedad en sí misma. Es un grupo de factores de riesgo que pueden llegar a desarrollar enfermedades crónicas más graves. Estos factores de riesgo son: 

  • Presión arterial alta
  • Nivel de azúcar en sangre alto 
  • Niveles de colesterol no saludables (niveles bajos de colesterol HDL “bueno”).
  • Triglicéridos séricos altos 
  • Obesidad abdominal

Es claro que tener cualquiera de estos factores de riesgo no es bueno para la salud, pero, cuando se combinan, preparan el escenario para problemas serios. Estos factores de riesgo duplican el riesgo de enfermedades de los vasos sanguíneos y del corazón, que pueden provocar ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. También aumentan cinco veces el riesgo de diabetes.

Complicaciones del síndrome metabólico

El síndrome metabólico se caracteriza por un estado de resistencia celular a la insulina, una hormona importante para convertir el azúcar en la energía necesaria para alimentar el cuerpo. La insulina, entre otras cosas, ayuda a que el azúcar en el torrente sanguíneo ingrese a las células, donde luego se almacena o se transforma en energía. 

Sin embargo, si las células se vuelven menos sensibles a la insulina, el azúcar tiene más dificultades para ingresar a las células, por lo que se producen altos niveles de azúcar en el torrente sanguíneo. Esta capacidad de respuesta reducida a la insulina conduce a una inflamación sistémica crónica y puede tener otros efectos negativos en su cuerpo, como daño en vasos sanguíneos, aumento de peso y empeoramiento de la resistencia a la insulina.

La resistencia a la insulina y síndrome metabólico pueden desembocar en una amplia gama de enfermedades, que incluyen:

  • Diabetes tipo 2
  • Hipertensión
  • Obesidad
  • Cardiopatía
  • Enfermedad del hígado graso
  • Cálculos biliares
  • Síndrome de ovario poliquístico (SOP)
  • Apnea obstructiva del sueño
  • Gota

Causas: ¿Por qué se llega al síndrome metabólico?

Los expertos no están seguros de por qué se desarrolla el síndrome metabólico. Es una colección de factores de riesgo, no una sola enfermedad, así que probablemente sea producto de muchas variables. La fisiopatología es muy compleja y sólo se ha dilucidado parcialmente. 

Sabemos que la mayoría de las personas afectadas por esta condición son mayores, obesas, sedentarias y tienen cierto grado de resistencia a la insulina. El estrés también puede ser un factor contribuyente. Los factores de riesgo más importantes son: una alimentación deficiente (especialmente el consumo de azúcar refinada)y obesidad;  la genética; el envejecimiento; un desequilibrio hormonal; el sedentarismo o la baja actividad física;la alteración del sueño y el ciclo circadiano; trastornos del estado de ánimo; uso de medicamentos psicotrópicos; y consumo excesivo de alcohol y/o tabaco.

La buena noticia es que el síndrome metabólico se puede controlar, en gran medida, con cambios en tu estilo de vida.

¿Cómo prevenir y tratar el síndrome metabólico?

Dado que la inactividad física, una alimentación deficiente y el exceso de peso son factores decisivos en el desarrollo del síndrome metabólico, hacer ejercicio y comer saludablemente pueden ayudar a reducir o prevenir las complicaciones asociadas con esta condición . Algunas de las maneras de reducir prevenir el desarrollo de síndrome metabólico o reducir sus riesgos son:

  1. Una alimentación saludable y lograr un peso que sea saludable: si se tiene sobrepeso u obesidad, esto pueden ayudar a restaurar la capacidad de su cuerpo para reconocer la insulina y reducir en gran medida la posibilidad de que el síndrome se convierta en una enfermedad más grave. 
  1. Cambios en la alimentación: evita el azúcar refinada y las grasas saturadas. Come alimentos integrales naturales, verduras y frutas, pues los antioxidantes presentes en estos alimentos te ayudarán a controlar el estrés oxidativo que causa inflamación y enfermedades crónicas.
  1. Aumento de la actividad: esto puede mejorar la resistencia a la insulina. El ejercicio aeróbico, como una caminata diaria a paso ligero de 30 minutos, puede promover la pérdida de peso, mejorar la presión arterial y los niveles de triglicéridos y reducir el riesgo de desarrollar diabetes. 
  1. Evitar el alcohol y el tabaco: beber alcohol y fumar aumentan el riesgo de enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares, cáncer y enfermedades pulmonares. Dejar de fumar tiene muchos beneficios para la salud, especialmente si tienes síndrome metabólico.
  1. Consulta a tu médico: los cambios en el estilo de vida son extremadamente importantes en el control del síndrome metabólico, pero deben ir acompañados de un tratamiento médico pensado especialmente para ti. A veces pueden ser necesarios medicamentos para controlar las diferentes afecciones. 
  1. Tratar la resistencia a la insulina:

Como mencionamos antes, la resistencia a la insulina es uno de los factores principales que inciden en el síndrome metabólico, así que tratarla reducirá las complicaciones del mismo. 

Diamel: suplemento funcional

Diamel es un suplemento funcional e integral que actúa desde diferentes frentes:

  1. Páncreas: la arginina y el zinc presentes en Diamel estimulan la producción de insulina.
  2. Tracto intestinal: el extracto de alfalfa es un hipoglucemiante, es decir que reduce la glucosa a nivel intestinal (en un 30%).
  3. A nivel celular: Diamel contiene una gran cantidad de antioxidantes que neutralizan los radicales libres y permiten que los receptores de las células respondan mejor a la insulina. A su vez, el deterioro del metabolismo de la glucosa conlleva a un estrés oxidativo a nivel celular, que se contrarresta por medio de los antioxidantes de Diamel.
  4. A nivel renal: usualmente el sistema de reciclaje renal se deteriora por la resistencia a la insulina y la diabetes. Diamel busca restaurar los nutrientes eliminados a través de este mecanismo.

Por supuesto, este suplemento funcional se debe acompañar de una alimentación balanceada, actividad física regular y, en general, hábitos saludables. Lo importante es que te des cuenta que hay alternativas para reducir los riesgos del Síndrome metabólico y que, si actuamos a tiempo, es posible llevar una vida normal y encontrar bienestar. Si quieres saber más sobre Diamel, contacta a uno de nuestros asesores.