¿Podrían tus dolores de cabeza o migrañas provenir de una mala alimentación?

La Semana de Concientización sobre la Migraña comienzó el 6 de Septiembre.

Casi todo el mundo, de vez en cuando, experimenta dolores de cabeza. Estos pueden hacer que nos sintamos realmente mal. Aproximadamente dos tercios de la población de los países occidentales afirman que ocasionalmente los padecen. Una de cada cuatro personas se queja de tener dolores de cabeza regulares. Además de sufrir dolores de espalda, los dolores de cabeza son una de las quejas médicas más comunes y frecuentes.

Sin embargo, no todos los dolores de cabeza son iguales. Los expertos médicos han identificado más de 180 tipos diferentes de dolores de cabeza. Los síntomas pueden ser muy variados. Algunos pacientes se quejan de dolor punzante o de un martilleo insoportable en la cabeza y otros se quejan de tensión detrás de la frente. Los dolores de cabeza pueden comenzar gradualmente o desarrollarse muy repentinamente. Pueden ser sordos o punzantes, muy fuertes o apenas perceptibles. Pueden ocurrir en fases o sentirse continuamente. Más del 90 por ciento de los pacientes sufren de dos tipos de dolores de cabeza frecuentes: dolor de cabeza tensional o migraña.

Los dolores de cabeza o las migrañas pueden tener muchas causas. Los desencadenantes también pueden incluir alimentos. A menudo se sospecha de chocolate, queso y vino. Sin embargo, ¿alguna vez ha considerado la leche, los frutos secos o el gluten?

Las intolerancias alimentarias, como la intolerancia a la histamina o una alergia alimentaria tardía, también pueden causar dolores de cabeza. Combatirlos puede devolverle su calidad de vida.

¿Conoce tus propios desencadenantes personales?

¿La intolerancia a la histamina está causando sus dolores de cabeza?

La histamina es una hormona tisular que se produce de forma natural en el cuerpo, pero que también se absorbe a través de los alimentos, por ejemplo, pescado, queso, carne ahumada, salami o verduras como el chucrut.

Normalmente, la histamina es degradada en el cuerpo por la enzima diamino oxidasa (DAO). Sin embargo, si hay una deficiencia en la actividad o inhibición de la DAO, la histamina no puede metabolizarse por completo. Esto puede resultar en síntomas, como enrojecimiento de la piel, congestión o secreción nasal, dolor abdominal, diarrea o dolores de cabeza.

¿Puede una alergia alimentaria retardada ser el desencadenante de sus dolores de cabeza?

A veces, el cuerpo desencadena una respuesta de defensa del sistema inmunológico contra ciertos alimentos. Si por ejemplo el intestino delgado se daña debido al estrés, infecciones o medicamentos, otros constituyentes de los alimentos pueden ingresar al torrente sanguíneo “sin autorización” que generalmente no pueden hacerlo de manera pasiva. El sistema inmunológico luego identifica estos constituyentes de los alimentos como sustancias extrañas y forma anticuerpos IgG para contrarrestarlos. Estos anticuerpos se unen a los componentes de los alimentos y desencadenan más reacciones del sistema inmunológico. Estos podrían causar inflamaciones en el cuerpo, que finalmente pueden resultar en dolor de cabeza o migraña.

Puede averiguar si padece una alergia alimentaria tardía con un análisis de sangre ImuPro. Este análisis de sangre completo identifica una mayor cantidad de anticuerpos IgG contra determinados alimentos.

¡Es hora de deshacerse del dolor y sentirse mejor!

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